Plataforma Profesional. Portal Web y Directorio Impreso de Empresas, Productos y Servicios de Horticultura, Bricojardinería y su Industria Auxiliar.

Las empresas de semillas dedican un porcentaje importante de su presupuesto de I+D a la producción de portainjertos

El uso del injerto proporciona cultivos rentables y sanos

24/05/2012 Autor: Infolaboreo

 

 

 

El injerto es una de las técnicas agrícolas más empleadas en el cultivo hortícola, sobre todo en zonas áridas, de alta salinidad y con condiciones de cultivo extremas como es el caso de Almería. Esta técnica, cuya implantación se remonta a los primeros años del siglo XX, ayuda a los cultivos en los que se aplica a reducir el uso de fitosanitarios y desinfectantes de suelo, a recuperar el cultivo para el caso de las cucurbitáceas, y por supuesto, a incrementar la producción final de las plantaciones.

 

 

Para obtener una planta injertada de buena calidad, es necesario conocer muy bien el portainjerto y la variedad a injertar (injerto) y además, se requiere una planificación muy buena de la siembra, adelantando la siembra del patrón con respecto a la variedad o injerto. Es importante que la unión del injerto se realice cuando, tanto el patrón como el injerto, tengan una sección similar de tallo.

 

El proceso del injerto en sí consiste en hacer un corte en bisel en el tallo del portainjerto, generalmente debajo de los dos cotiledones. A posteriori se corta la raíz del injerto y se hace un corte en bisel que coincide con el corte del portainjerto para finalmente unir las dos partes mediante una pinza de silicona.

 

Después, las plantas se llevan a la cámara de injerto con unas condiciones climáticas óptimas de temperatura (24-26ºC), humedad (90-96%) e iluminación total. Se quedarán en esta cámara entre 7 y 9 días durante los cuales hay que bajar progresivamente la humedad a partir del tercer o cuarto día.

 

De allí pasan al invernadero, primero a una zona de aclimatación con malla de sombreo o dispositivo similar y luego al invernadero normal. El tiempo normal que transcurre desde la siembra hasta que la planta injertada esté lista para plantar puede variar entre 45 días en verano y 60 días en invierno.

 

Datos del sector

 

Las principales especies hortícolas injertadas son solanáceas (pimiento, tomate y berenjena) y cucurbitáceas (melón, sandía y pepino).

 

Actualmente, la hortícola que más se injerta en España es el cultivo de la sandía, seguido por el tomate que se posiciona de este modo, como el segundo cultivo mayoritario en el uso de injertos. Sin embargo, últimamente también está perfeccionándose esta técnica en cultivos como la berenjena, el pepino o el pimiento.

 

En el mercado español existen a día de hoy una gama completa de variedades de portainjertos que permiten al agricultor cultivar en terrenos muy fatigados, alargar el ciclo de cultivo y disminuir notablemente los problemas de enfermedades.

 

El desarrollo de nuevas variedades sólo es posible con una inversión continua en los programas de investigación, algo que aumenta cuando hablamos de una técnica relativamente nueva como son los portainjertos. Actualmente en España las empresas obtentoras cuentan con unos 35 centros de I+D a los que destinan 46,8 millones de euros anuales para investigación.

 

El sector hortícola, en el que se emplea cada vez más la técnica del injerto, constituye una parte fundamental de la producción agrícola, con un valor anual cercano a los 7.000 millones de euros convirtiendo a nuestro país en el primer exportador mundial.

 

La técnica del injerto permite a los agricultores aumentar sus producciones de forma sostenible, combatiendo los desafíos agrícolas y aumentando la rentabilidad de sus explotaciones.